Clara Douradinha confesó que pensaba que el lugar de castigo de La Soñada iba a ser un trampolín para ser más popular. Pero aseguró en la previa de la Gala que "no paro de llorar, estoy mal y angustiada". Tanto ella como Joaquín Starosta están aislados por llevar celulares al reality, y pueden recibir más sanciones.
"No paro de llorar, estoy mal y angustiada", aseguró Clara Douradinha en la previa de la Gala.
"La situación no es algo que este buena. Yo subestimé al Destierro, se me pasó por la cabeza decir que es bueno y que algún día quería ir. Ahora no se lo recomiendo a nadie", afirmó Clarita.
Luego analizó: "Pensé que en cuanto a popularidad me iba a servir muchísimo, pero llegue a la conclusión de que yo afuera era otra persona, Y por ahí el juego, la competencia, me llevó a mostrar una parte mía que no quiero mostrar".
"Yo afuera trabajo en mí, no veo lo que están haciendo los demás, y acá si", analizó.
Y en el final, habló de su "amor" en La Soñada: "Muchas cosas de las que pensé están relacionadas con Fefe. El es mi contención, pero también es un polo opuesto".
Luego analizó: "Pensé que en cuanto a popularidad me iba a servir muchísimo, pero llegue a la conclusión de que yo afuera era otra persona, Y por ahí el juego, la competencia, me llevó a mostrar una parte mía que no quiero mostrar".
"Yo afuera trabajo en mí, no veo lo que están haciendo los demás, y acá si", analizó.
Y en el final, habló de su "amor" en La Soñada: "Muchas cosas de las que pensé están relacionadas con Fefe. El es mi contención, pero también es un polo opuesto".
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