El coreógrafo explicó por qué tuvo una suerte de ataque de pánico sobre el escenario días atrás, y se cruzó con Flavio Mendoza, con el que luego se amigó y se fundió en un fuerte abrazo. "Estoy cansado de que me critiquen", confesó el participante.
Apenas ingresó al estudio, Marcelo Iripino habló sobre el ataque de pánico que había tenido: “Ellos me dijeron que debía venir a la pista vacía para volver amigarme con el entorno. Le agradezco a Moria Casán por haberme entendido y espero superar ésta barrera hoy para dejar atrás el miedo".
Enseguida sostuvo: “Estoy cansado de que me critiquen por llorar, no llorar, decir o no decir. Marcelo Iripino es así y al que no le guste, que no se suba al tren”.
Después del baile, Flavio Mendoza hizo su devolución: “Hoy te vi bailar bien y me gustó y ojalá que éste certamen te llene el alma como el Bailando 2010 lo hizo conmigo”. Al toque, ambos se fundieron en un fuerte abrazo y se quebraron.
Por último, Marcelo Polino liquidó a Iripino: “A la córeo le faltó sensualidad y contacto entre los participantes. La previa fue demasiado lacrimógena".
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